El Senado y Cámara de Diputados...

Artículo 1°. Institúyase el día 09 de Marzo de cada año como “Día Nacional del Retorno a la Patria”, a fin de reconocer expresamente el interés de Nuestra Patria en fomentar el regreso de todos los argentinos que, por la razón que fuere, residan en extranjeros países

Artículo 2°. La fecha mencionada queda incorporada al calendario de actos y conmemoraciones

Artículo 3°. El Poder Ejecutivo Nacional, por intermedio de La Cancillería Argentina, las Embajadas y Consulados que correspondan, en la semana de conmemoración, realizarán a disposición de los compatriotas y/o sus descendientes que así lo acrediten, campañas de difusión e incentivación, incluso colocándose a disposición en lo necesario para gestionar, agilizar y concretar el regreso de los connacionales a la República Argentina.

Artículo 4°. Invitase a las provincias a adherirse a la celebración, dando en el ámbito de su jurisdicción la más amplia difusión a la celebración.

Artículo 5°. De forma.

Señor presidente:

El presente proyecto, que reproduce el expediente 2816-D-2014 intenta establecer manifestando que el 9 de marzo de 1812 el General José de San Martín arriba a Buenos Aires proveniente de Londres a bordo de la fragata inglesa George Canning con la firme decisión de organizar la lucha libertadora de nuestra patria.

Publicaba La Gaceta de Buenos Aires, el viernes 20 de marzo de 1812 lo siguiente (las palabras están escritas con la ortografía y la acentuación del original).

"El 9 del corriente ha llegado á este puerto la fragata inglesa Jorge Caning procedente de Londres en 50 días de navegación." Más adelante continúa: "Á este puerto han llegado entre otros particulares que conducía la fragata inglesa, el teniente coronel de caballería D. José San Martín primer ayudante de campo del general en jefe del ejército de la Isla Marques de Compigny : el Alférez de navío D. José Zapiola : el capitán de milicias D. Francisco Chilaver : el alférez de carabineros reales D. Carlos Alvear y Balbaltro :el subteniente de infantería D. Antonio Arellano y el primer teniente de guardias valonas Barón de Olembert. Estos individuos han venido á ofrecer sus servicios al gobierno, y han sido recibidos con la consideración que merecen por los sentimientos que protestan en obsequio de los interéses de la patria."

Cabe recordar que el General San Martín se trasladó a España junto con sus padres en el año 1784 donde ingresó al Seminario de Nobles de Madrid. En 1789 comienza su carrera militar en el regimiento de Murcia. Luchó en la campaña de África combatiendo en Melilla y Orán. En 1797 es ascendido a subteniente por sus acciones frente a los franceses en los Pirineos.

En 1797 su regimiento participa en las batallas navales contra la flota inglesa en el Mediterráneo.

Durante el período que sigue, lucha en diferentes acciones en el sur de España, en Gibraltar y Cádiz, con el grado de capitán 2° de infantería ligera.

En 1808 las tropas de Napoleón invaden la Península y el rey Fernando VII es hecho prisionero. Estalla la rebelión contra el Emperador y su Hermano José Bonaparte, que había sido proclamado Rey de España. Se establece una Junta de Gobierno que actúa primero en Sevilla y luego en Cádiz. San Martín es ascendido por la Junta al cargo de ayudante 1° del regimiento de Voluntarios de Campo Mayor. Distinguido por sus acciones contra los franceses, llega luego a ser capitán del regimiento de Borbón. El ejército ataca a los franceses y los vence en la batalla de Baylén, el 19 de julio de 1808; allí se destaca San Martín. Esta victoria permite al ejército de Andalucía recuperar Madrid y es la primera derrota importante de las tropas de Napoleón. Por todo esto, San Martín recibe el grado de teniente coronel y es condecorado con una medalla de oro.

Este brevísimo relato de la carrera militar del General San Martin en Europa pretende simplemente dimensionar la talla de su figura, su éxito y el reconocimiento del que ya gozaba por entonces. A pesar de todo ello el General se embarca en enero de 1812 con rumbo al sur demostrando claramente su valor, su coraje y, particularmente, el amor por la tierra que lo vio nacer.

Como lo hizo San Martín, muchos argentinos emigraron a muchas partes del mundo. La mayoría son personas de clase media y clase media alta, aunque también hay un número importante de argentinos pobres que han emigrado a países vecinos. Los destinos de migración más populares en América son: Estados Unidos, Paraguay, Chile, Brasil, Uruguay, Bolivia y Canadá, pero también hay otras comunidades destacadas en Venezuela, México, Perú, Colombia, Panamá, Ecuador y Costa Rica. En Europa, España e Italia tienen comunidades numerosas pero también en el Reino Unido, Francia y Alemania. Además hay importantes comunidades en Israel y Australia. Según el último informe migratorio argentino de la Organización Internacional para las Migraciones el 2012 son 971.698 argentinos que han emigrado desde el año 2000 al 2010 . Se calcula que sus descendientes serían alrededor de 1.900.000.

La primera ola de emigración se produjo durante la última dictadura militar (entre 1976 y 1983) teniendo como destinos principales España, Estados Unidos, México y Venezuela. Durante los años 1990, debido a la supresión de las visas entre la Argentina y Estados Unidos, miles de argentinos emigraron hacia el país norteamericano. La última gran ola de emigración se dio durante la crisis del año 2001, siendo el principal destino Europa, en especial España.

En la última década, como el resultado de un crecimiento económico sostenido en el país, y en respuesta a la crisis, las medidas de ajuste y los fuertes niveles de desocupación que atraviesan países como España y Estados Unidos, se ha revertido la migración, retornando a la Argentina gran cantidad de los que habían emigrado. Sólo en 2010, se repatriaron 12.237 argentinos, siendo después de los ecuatorianos, los que han abandonado España en mayor cantidad.

La sanción de la presente Ley pretende manifestar expresamente el interés de la República Argentina de cobijar nuevamente a sus compatriotas que han emigrado, como así también dar contención a los inmigrantes argentinos y a sus descendientes en el ámbito laboral y de la educación.

Por ello, La Cancillería Argentina, las Embajadas y Consulados que correspondan, en la semana de conmemoración, realizarán a disposición de los compatriotas y/o sus descendientes que así lo acrediten, campañas de difusión e incentivación, incluso colocándose a disposición en lo necesario para gestionar, agilizar y concretar el regreso de los connacionales a la República Argentina.-

Por los fundamentos acá expuestos, solicito a mis pares la aprobación del presente Proyecto de Ley.