La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

Expresar preocupación por el hecho acontecido el 11 de noviembre en el cual una mujer dio a luz en la sala de espera de la guardia del hospital Francisco Santojanni ubicado en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Señor presidente:

El pasado 11 de noviembre en el Hospital Francisco Santojanni, una mujer dió a luz en la sala de espera, dando muestras del deterioro institucional que nuestro país está atravesando.

El hospital Santojanni, se encuentra ubicado en el barrio de Liniers, zona sur de CABA, en un área de influencia de 1.500.000 habitantes, en donde se sitúa el mayor porcentaje de población sin cobertura de obra social (23,4%) , índice que se encuentra por encima del índice de la Ciudad, que es de aproximadamente un (18,7%). En la misma geografía el embarazo adolescente y el flagelo de las “enfermedades de la pobreza” como el chagas, tuberculosis, dengue y otras afecciones parasitarias y respiratorias.

Aproximadamente un 60% de la población atendida en el Hospital Santojanni, proviene de la provincia de Buenos Aires, generando una demanda sin techo. Respecto de las maternidades el hospital Santojanni ocupa el segundo lugar en partos anuales detrás de la maternidad Sarda.

Este hecho lamentable va en contra de las conquistas logradas mediante la ley de Parto Humanizado (ley 25.929) y su reglamentación (decreto 2035/2015). La ley de Parto Humanizado, promueve el respeto a la familia y a sus particularidades, como la religión, raza y nacionalidad, acompañando en la toma de decisiones seguras e informadas. Es claro que una mujer, a quien la deficiencia en el sistema de salud, la obliga a parir en el suelo de una sala de espera, es una mujer a la cual se le han vulnerado todos los derechos, no solo los consagrados en la ley 25.929, además los constitucionales.

Esa mujer, pariendo en el suelo de un hospital, es la materialización de la ausencia del Estado, la saturación y colapso de un sistema de salud rebalsado en su capacidad, que sobre exige a sus profesionales, al punto de no poder ejercer su profesión de forma digna. No es posible olvidar la vulneración de los derechos del nacido en esas circunstancias, quien no tuvo un trato respetuoso ni digno.

Es por ello solicito a mis pares me acompañen en la sanción del presente proyecto.