Esta fotografía es parte de la serie "Vietnam, el Gran Dragón Dorado”, donada por el artista en el año 2001.
En 1997 Mónaco viaja a Vietnam, un territorio que comenzaba a reconstruirse desde las ruinas luego de la guerra.
En esta oportunidad registra una escena de Hue, una ciudad que supo ser el hogar de los emperadores de Nguyen, una dinastía feudal que dominó gran parte del sur de ese país desde el siglo XVII hasta el siglo XIX.
La imagen capturada dista mucho de lo que podríamos imaginar de aquel clima imperial: calma y armonía con el entorno natural. En palabras del autor “los vietnamistas tienen memoria pero no rencor, y eso los deja crecer”.