La obra forma parte de una carpeta referente al tango Silbando.
La artista, nacida en Hungría, representa en este grabado a una mujer de perfil que ocupa gran parte de la composición. Resuelve el rostro a partir de la resolución geométrica de frente, nariz y cabellera. Es notoria la distribución de las texturas blancas sobre los planos negros, característicos de la técnica xilográfica.