Rebolledo Correa fue dueño de un estilo propio con influencias impresionistas debido al gran interés por plasmar la luz solar. En su evolución artística fue desarrollando escenas luminosas al aire libre.
En este caso, utilizando el juego expresivo de las luces y sombras, logró mostrar la lucha entre el bien el mal, temática universal que se manifiesta en una gran diversidad de obras de arte a lo largo de la historia.