El distintivo es redondo, amarillo en el centro con la efigie de ambos candidatos y una franja perimetral rosada.
La fórmula radical Alvear - Mosca se enfrentó con la fórmula oficialista de la Concordancia Ortíz - Castillo. Esta última se impuso en una elección que fue recordada como una de las más fraudulentas de la historia nacional, posterior a la sanción de la Ley Sáenz Peña.