14. INSERCIÓN SOLICITADA POR LA SEÑORA DIPUTADA REGAZZOLI
Homenaje de la señora diputada a la memoria del teniente general don Juan Domingo Perón en un nuevo aniversario de su fallecimiento
Hoy se cumplen 36 años de la muerte del político más importante de nuestro país.
El sociólogo Juan Carlos Torre escribe que “la historia política de la Argentina en el siglo XX se divide en dos: antes y después del surgimiento del peronismo”.
Juan Domingo Perón fue, entre otras cosas, el creador del movimiento político y social que tuvo un rol fundamental en la historia argentina desde 1945 a la fecha. Un movimiento social que supo estar entre los más numerosos del mundo entero.
Perón fue el responsable de que la clase trabajadora argentina accediera a nuevos derechos y beneficios. Derechos que hasta entonces no se conocían y eran impensables, como vacaciones pagas, obra social, aguinaldos, jornadas laborales y la sindicalización de los trabajadores. También fue el responsable de que en nuestro país, por primera vez, se produjera un reparto equitativo de las riquezas.
Sus logros llegan hasta el día de la fecha. Y en mi calidad de mujer no puedo dejar de mencionar que fue durante uno de sus gobiernos donde las mujeres pudimos tener acceso a la actividad política, desde el voto hasta ocupar cargos electivos.
Solamente su nombre generó amores y odios. Pero fue el primer sentimiento el que movilizó a todo un pueblo y lo hizo protagonista de su propio futuro.
Podemos también decir que con sus acciones, que fueron más allá de la cuestión doctrinaria, devolvió dignidad a las clases populares. Fue esa simbiosis entre el hombre político y una nación hambrienta de reivindicaciones la que movilizó a las masas populares como nunca se había hecho y –lamentablemente- como no se volvio a producir.
El inolvidable Arturo Jauretche destacaba que “Lo que movilizó las masas hacia Perón no fue el resentimiento, fue la esperanza”.
Cuando no se lo pudo vencer en las urnas y con las armas que ofrece la Constitución, sus detractores recurrieron a la violencia contra el pueblo, a través de formas de gobierno totalitarias y violentas.
No pudieron, ni siquiera prohibiendo su sola mención, separarlo de la memoria colectiva del pueblo argentino. Solo generaron la mística de una resistencia sin precedentes en intensidad y tiempo.
Bajo su nombre fueron prohibidos y perseguidos miles de compatriotas. Otros miles sufrieron la represión, las torturas, desapariciones y muerte por adherir a su doctrina.
Pero este sentimiento popular hizo que en vez de amedrentarse, el pueblo devolviera con militancia política los ataques que intentaron atomizarlo.
Muchos creyeron que con su desaparición física se terminaría el peronismo, pero se equivocaron.
Su muerte solamente multiplicó el sentimiento del pueblo que interpretó quien representa genuinamente sus intereses.
Su ausencia física lejos de ubicarlo en el olvido, hizo que el nombre de Perón quedara asociado definitivamente en la Argentina a los conceptos de Independencia Económica, soberanía Política y Justicia Social.
Fue Perón el que le dio cauce al sentir nacional y popular, demostrando que no es patrimonio de unos cuantos, sino de todos, por eso para finalizar dejo sonando en este recinto las palabras del General Perón que en junio de 1974 manifestara en la plaza de mayo “..me llevo en mis oídos la más maravillosa música que es para mi la palabra del Pueblo Argentino…”.